Tu recuerdo nunca me había molestado hasta que hoy tu nombre he mencionado. Antes ya lo había echo pero nunca había tenido esa sensación, no fue miedo o enojo... solo tristeza. Todo había sido un secreto durante muchos años, a nadie se lo había contado... creí que siempre iba a permanecer así... hasta que ella llegó y sin querer me lo saco. Tu recuerdo surgió y desde entonces me molestas... por ti soy quien soy ahora, no quiero serlo, pero tampoco puedo evitarlo. Tú me marcaste cuando conmigo te sobrepasaste. Tu recuerdo permanece siempre en mi mente, trato de evitarlo pero no puedo controlarlo... con cada día que pasa es más fuerte. Tus caricias y tu aliento están tatuados en mi piel... me haces sentir mal con solo recordarte... debo de estar condenado a siempre odiarte ya que no creo que de mi mente pueda sacarte.