Cuando te tuve entre mis brazos
jamás me imaginé... que te amaría tanto,
cuando te entregas con ahínco a tus hijos
no te fijas cómo serán ellos…
te entregas porque eres madre,
y el ser madre te permite
dar todo por ellos,
hoy fue un día especial
porque sé
que Dios
te tiene preparadas
tantas bendiciones,
no me arrepiento
de haberte escogido
para formar parte
de nuestra hermosa familia.
¡Te amo, hijo mío!