Muchas veces mía, otras veces fría.
Estás llena de muchas vías, no todas alternativas. Vida, qué difícil se me haría si no estuviese viva.
Iba por la vida... Creía y decía pero nunca lo hacía. El pensamiento por las vías corría, pero nunca por las mías. O en casos, las vías incorrectas.
La vía correcta ha sido cubierta por las “maravillas”. Vaya manía de la vida, de dejarme sola en un camino sin salida. Puedo lucir pálida y entristecida pero nunca decaída.
No es lo mío lucir vencida, solo estoy sin energías. Nadie dijo lo difícil que sería vivir esta vida en estas vías. Aún así, estoy agradecida porque cada día vivo la vida.
Esta vida que me da vida en cada una de mis heridas, pues las vías siempre han sido frías. Nunca mías.
Así es la vida, muchas veces mía, otras veces frías.