No soy tu vitamina
tampoco tu medicina.
No soy tu adicción
ni tu otra atracción.
Te daba lo que me pedías
también lo que tú querías
eso ya se acabó
pues ya no somos dos.
Todo esto se terminó
pues tú fuiste el que a mí hirió.
Ya no haremos eso de ir a dar un paseo
tampoco aquello de pensar que todo era bello.
No soy una nuez o un pez
para que me trates con tanta sencillez.
No soy un ganso mucho menos manso
sabes algo que de ti me canso.
Ya no dirás “Ella era mía”
según tú esto dolería
y que yo de ti escaparía
yo dije ¿Qué clase es de brujería?
Pero ahora soltera brinco de alegría
me usas como quieres,
tú solo mientes y
a todo el mundo hieres.