Estando bajo la lluvia caliente se convierte todo en una pasión, los cuerpos están ardiendo y buscan penetrar en su dolor, desatan la vista ente ambas miradas, ardiendo en llamas piden a gritos las llamadas, esos suspiros tan intensos bajo esas sabanas, sólo los dos dejan salir a sus almas, pero él le dice sin palabras cuanto la quiere, y ella responde con movimientos a su piel sin rencor con hermosas palabras sin hablar su dulce olor.
Esas presiones se aceleran y ni su propio cuerpo las puede parar, sólo pídele a ese hechicero que escriba el cuento sin su final.
El toca su piel como si se fuera acabar busca ese punto para poderla excitar, ella grita sin rencor que evite parar, ese dolor con nada se puede comparar, no existen palabras para poderlo expresar sólo imagina ese preso sin voltear hacia atrás, mira lo que tienes a tu lado mujer y no lo dejes ir, que momentos como ese sólo existen una vez, pero cuando duermas junto a él habrá una ocasión especial, no todo es igual, ve siempre hacia adelante y él te apoyara, no morirás sola que él estará ahí, se apoya uno al otro sin tener que discutir, pero sólo te advierto que esto es el comienzo y el proceso lo vivo y el final no lo encuentro.
Esas presiones se aceleran y ni su propio cuerpo las puede parar, sólo pídele a ese hechicero que escriba el cuento sin su final.
Colaboración de Yajaira Martínez
México