No fueron tiempos cualesquiera, tampoco momentos que simplemente pasaron, al contrario, fueron grandes días, días de alegría, felicidad, risas, juegos, amor mucho amor. Aunque también hubo ratos de tristeza, de llanto, de cólera. Que simplemente pasaron.
Cómo olvidarlos si fueron los mejores porque fueron a tu lado.
Hay algo que tengo dentro de mí que hace que te recuerde, es algo bonito pero a la vez difícil de tener, es como tenerte cerca y a la vez lejos. Lo único cierto es que no te tengo a mi lado.
Quisiera decirte mil cosas al oído, cara a cara, por teléfono o por mensajes, decirte lo que solo sabe mi silencio. Mi silencio que sabe todo lo que en estos días callé. Pensé que era fuerte, más fuerte que todo esto, pero ¡no! Hoy me doy cuenta de que soy más débil de lo que creí, te tuve entre mis brazos y en el momento que más te necesitaba te perdí.
Me diste muchas cosas, me enseñaste a querer, me enseñaste a amar, me enseñaste muchas cosas que hoy no puedo olvidar. Un amor verdadero es aquel que tuvimos tu y yo y lo sabemos. K y J para siempre, lo prometimos y creo que aun seguimos en deuda, el destino quiso separarnos y nosotros solo dijimos adiós y yo sigo rogando que se convierta en un hasta pronto.
Ayer te vi y no sabes esas locas ganas que tuve de hablarte, y como te dije, este algo que llevo dentro me obligó a caminar hacia ti y decirte “Hola”. Y conversamos, y fue lindo.
Colaboración de J o c e l o i s
Perú