Lo nuestro terminó;
fue cayendo como estrella muerta,
fue perdiéndose en el camino,
Se nos fue cerrando una puerta.
Tu mirada lunada llora
y mis ojos derraman dolor.
La frustración besa nuestros corazones ahora,
mientras vuela lejos el amor.
Tus labios de miel en pasión,
reclaman los míos con locura.
La agonía reina en mi corazón,
y luego todo se transforma en aventura.
Tus manos de papel,
cubren las mías con regazo de amor,
mis brazos te envuelven en dulce miel
y todo se vuelve un grato momento en color.
Nos despedimos sin temor,
y nuestros caminos se separan.
Nos despedimos sin rencor,
Nos despedimos sin la voz del amor.
Colaboración de Cristina Salvagno Sallé
Uruguay