Cuando te conocí, me pareciste una persona increíble. Me sumergí en tus ojos dejándome llevar por la dulzura en ellos. Supe de tu pasado y me emocioné, no sólo quise comprenderte, también consolarte, y al mismo tiempo aconsejarte.
Llegué a amarte, y tú no lo notabas, pero estaba extasiado de ti. No pensaba en otra cosa, en todo estabas tú, cualquier cosa me hacía pensar en ti.
Hoy después de tanto tiempo, tengo un recuerdo vago, pero agradable. Si te volviera a ver, no sé lo que haría, sólo te pensaría hasta el anochecer.
Colaboración de Dylan
Argentina