Me costó aceptar tu desprecio, me costó aceptar un no te quiero, me costó aceptar que ames a otro, me cuesta aceptar que me enamoré y no me correspondes, me cuesta aceptar que mi amor nació muerto, que pasarán los días y no te podré olvidar, que solo te recordaré por una canción, que tu adiós esta lleno de dolor porque me querías amar y querer…
Me quiero morir pensando en que no hubo oportunidad, en agonía esperaré un llamado de ti, mientras tanto, te observaré con la tierna mirada que te mereces, mientras tanto, te observaré en los brazos de otro hombre sufriendo, porque difícilmente de este amor me olvidaré…
Espero no te importe este dolor, porque para mi tu felicidad es mi consuelo, te juro que te podrán dar mil cosas, pero no el amor sincero que viene de mi corazón triste y solo me quedaré esperando en la oscuridad, esperando a volver a ver tus ojos, esos que me iluminaron cuando solo veía negro, en la que mis brazos y besos no te encuentran, será tan difícil olvidar, será tan difícil volver a amar...
Es una especie de poema escrito para despedirme de una persona a la que amé mucho pero nunca me correspondió
Colaboración de
O.S.
Chile