Le escribo a la mujer
que me parió un día,
que me dejó su amor,
que hoy guardo todavía.
Le escribo a la mujer
que me dio el primer beso,
pues fue ella la primera,
la que despertó mi sexo.
Les escribo a las mujeres
que me entregaron su amor,
les pido mil disculpas,
pues no fui su trovador.
Les escribo a las mujeres
que me dejaron llorando,
gracias a ellas
hoy he aprendido tanto.
Les escribo también
a aquellas que lloraron,
que yo no las dejara
y ahora están cantando.
Les escribo a las mujeres
que fueron mis amigas,
pues ellas me enseñaron
que existe otra vida.
Les escribo a todas ellas
que fueron mis estrellas,
hoy solo tengo una
y me quedo con ella.
Colaboración de Esteban Celis G. "El Calentano"
México