Guardo toneladas de poesía explosiva junto a mi
cama y una pistola cargada de miedo bajo mi almohada,
Guardo palabras del infierno y del cielo risas prohibidas y gritos tan
fuertes que parecen silencios que hacen heridas, poesía, brujería.
Guarde las formulas de un viejo adivino entre mis libros que no se pueden
pronunciar en voz alta o estas perdido,
Guardo las letras que consume el infierno en mi cabeza y terremotos de
oraciones que no se rezan.
Colaboración de Carlos
Colombia