Soy antisocial: sí, soy antisocial, o eso es lo que creen la mayoría de los mortales que me conocen.
No me gusta salir con grupos grandes de gente ya que, en ellos, el mayor reto es demostrar quién “la tiene más grande”, me explico, cuando estás en grupo, no tratas de aprender nada de los demás, sino, de demostrar a los demás lo bueno que eres aunque para ello tengas que pisotearles, en un grupo de gente grande, no triunfa el que es mejor persona, sino el que tiene el ego más grande.
Imaginad que el ego es una burbuja que puede expandirse pero no deja que nada entre en ella, la visión sería la de un grupo de burbujas en las que mientras unas menguan otras ocupan todo el lugar, y cuanto más grandes son, más difícil es que la persona que está dentro de esa burbuja empatice con los demás, ya que para ello tendría que recorrer una enorme distancia.
Él sabe que la gente puede ver esa enorme burbuja, la que oculta su verdadero yo, el cual él ni siquiera conoce, y por el miedo de no gustar por cómo es en realidad, es más, por temor a no gustarse a sí mismo, necesita estar siempre rodeado de gente para poder seguir viviendo esa falsa realidad y huye de estar solo porque a pesar de que la burbuja le protege de los demás, no puede protegerle de sí mismo y sus pensamientos, los cuales le advierten de que se está equivocando y debe salir de la zona de confort.
Siento dolor cuando los demás sufren, siento amor por todos los seres vivos, no me gusta la destrucción que hacemos de la naturaleza e incluso me molesta que las personas maltraten los objetos, dudo que haya algo en el mundo que “no valga nada”, no creo en las clases sociales, lo cual siempre me ha traído problemas, no tengo por qué tratar como un dios a alguien por ser rico o famoso, esto la gente dice que lo comparte pero no es cierto, solo hay que imaginar cómo reaccionarían si en una comida de amigos invitaras a un mendigo o a un futbolista, no hace falta que explique lo que ocurriría.
No somos libres, juzgamos a las personas sin conocerlas o por su ego, solo conocemos lo que ellas quieren mostrar, no vemos más allá y no nos esforzamos en verlo porque rechazamos a una persona que tiene la ropa rota, el pelo sucio, vive en la calle… ¿acaso esa persona es menos que tú? Yo creo que no, esa persona o no vive en una burbuja de ego, o es tan pequeña que no la puedes ver (no digo que se desprendiera de ella, en la mayoría de los casos es por falta de dinero, lo sé) y no la reconoces porque es una persona de verdad y no sabes cómo tratarla porque en realidad no estamos acostumbrados a tratar con personas.
Lo que tenemos al final es un mundo lleno de burbujas pequeñas asfixiándose y envidiando a las burbujas grandes ¿no es mejor vivir fuera de esa burbuja? Yo vivo fuera, y desde aquí el mundo es maravilloso, puedo ver lo que hay dentro de las personas, veo cómo intenta salir de su burbuja, algunas personas se dan cuenta inconscientemente y salen de su burbuja por un momento en el que sientes algo especial, una conexión, eso le ha pasado a todo el mundo, y solo es posible cuando sales de tu burbuja. Es decir, podrías sentir esa conexión con muchísimas más personas de las que crees.
Disfruto de la vida, siento amor por ella, la luna, las estrellas, las nubes, el sol, los animales, la naturaleza en general, en cambio, cuando veo lo que provoca esta forma de vida que se limita en ser números, estar clasificados en negro, blanco, judío, cristiano, gay, hetero, rico, pobre… el maltrato que sufren los animales, las guerras, el racismo, el sexismo y la destrucción que provocamos en el medio ambiente (nuestro hogar) todo esto para poder seguir alimentando a las burbujas, sufro, me afecta profundamente, y por eso necesito pasar grandes cantidades de tiempo sola, para reponer la energía perdida y sobreponerme del sentimiento de culpa por hacer la vista gorda e intentar mirar para otro lado para no ver lo que está pasando.
Y por eso soy antisocial.
Colaboración de Antisocial
España