En el mundo aún hay bellezas no descubiertas, como tu mirada todas las mañanas al despertar o tu sonrisa al despedirte, tu belleza es perfecta en otoño y verano pero toda tú eres bella como una mañana de invierno, impredecible y directa que me haces que mi huesos tiemblen y mi piel se erize al momento de tocarte; esa eres tú mi mañana de invierno, esas mañanas que no existen mucho así eres tú perfecta y fría que me hace odiarte pero a la vez amarte tanto...