¿Luchar?... ¿contra qué? ¿Contra quienes?... No, estoy tan cansada que dejaré que mi cuerpo repose en tu regazo, para que tu manos acaricien mi rostro y mi pelo, y beses mi frente...
¿Dónde estás amor mío? Te extraño, he sentido tu presencia muy cerca de mí. Sé que eres tú... ¡Que aún estás junto a mí y te cuesta trabajo partir! ¡Encenderé una luz para que esta guíe tu camino amor mío...! Ve anda... Ve no te detengas sigue caminando, ve hasta donde está Dios y dile que has terminado tu misión que deseas descansar... En paz.