Hoy me levanto pensando, diciéndome algo pero no lo entendí; siguió dándome pistas, pero tampoco lo entendí. Quise volverme a dormir para que se calle, pero el cómo siempre me levanto suave y delicado como suele hacerlo diciendo que es hora de levantarse, pero antes me dijo lo siguiente: para mi tu cerebro no existe, el tiempo tampoco ni el espacio. Solo existes tú, quien eres mi universo mas allá del tiempo y el espacio. Mi voz es tu conciencia la que te acompaña y te habla y solo quiero decirte que te levantes y vivas por mi y dar gracias por todos los seres y el universo que los rodea.