Quiero dejarte escrito mucho de lo quisiera platicar contigo, estoy segura que si tengo la oportunidad de hacerlo los nervios provocarán que muchas cosas las olvide, desde que trabajo con ancianos he aprendido mucho de ellos, de hecho el solicitarte que platiquemos es porque alguien de 80 años cuando expresé llorando algunos de mis pensamientos me dijo: ¿ya lo sabe él? Y yo contesté que no, entonces me hicieron ver que es muy importante que conozcas muchas de las cosas que ahora con el paso del tiempo pienso, no sé qué resultado tendrá está platica pero no quiero quedarme con las ganas de hacerlo.
Después de tantos años fuera de casa, lejos de ti y de lo nuestro, (perdona si me refiero así pero nunca he podido expresarme ni concebirlo de otra forma, para mí siempre fuimos, somos y seremos), después de tantas y tantas experiencias se aprende, es muy cierto que el equivocarse nos hace crecer, es aprendizaje, bueno yo he pensado mucho en los muchachos, en nuestro mundo, en nuestras cosas, en los años que quedan por vivir, en ti, en mí, en el tiempo, en los errores anteriormente vividos, en nuestro sufrimiento, en nuestra búsqueda por querer rehacer la vida y he llegado a la conclusión de que jamás nada ni nadie termina con lo que ya está hecho,
que nosotros no tuvimos a nadie que nos aconsejara, que no recibimos ningún apoyo, ninguna ayuda, ningún consejo, actuamos por impulso, por desesperación, por enojo, por coraje, por resentimientos y eso no tuvo un buen resultado aunque aparentemente los dos tratamos de vernos bien sabemos que no es así, sabemos que la ira que sentimos años atrás nos llevó a actuar de una forma precipitada, te digo todo esto porque mi deseo es reconciliarme con la vida, conmigo misma, yo no quiero esperar a estar postrada en una cama con una enfermedad terminal para hacerte saber todo esto, pues ni siquiera sé si podría hacerlo y en ese entonces ya no serviría de mucho.
Prefiero y he decidido ahora compartir mis sueños y mis ilusiones, mi deseo, si de algo sirviera sería perfecto y si después de escucharme, de leer este escrito todo siguiera igual pues cuando menos tendré la tranquilidad de haberlo expresado, de que lo sabes y que no lo guardé en silencio. Quiero que sepas que te agradezco mucho esta oportunidad de que me escuches, no me vas a creer pero me causa mucho nerviosismo saber que voy a verte para que me escuches, mi interés es precisamente platicar algunas cosas que nunca hemos tenido la oportunidad de hablar, hace unos días por teléfono te expresé que me gustaría que cambiaras la percepción que tienes de lo que significas para mí,
te dije que te quiero mucho, que siempre te he admirado, que me gusta tu carácter, que reconozco tus enormes cualidades, que si hay algo rescatable de toda esta experiencia tan desagradable es que a través de ella y por medio de muchas situaciones y personas lo único bueno es que en lo personal descubrí cuánto te quiero, me he convencido de lo que significas para mí y lo importante que eres en mi vida, te parecerá extraño y la verdad es parte de la razón de los nervios que me causa esta plática, sin embargo, y a pesar de que me siento un tanto extraña he tomado la decisión de hablar porque pudiera servir de mucho y porque me interesa que ya pienses de otra manera con respecto a mí.
Es difícil pero no imposible que me creas que he recapacitado mucho, que he cambiado, que valoro la vida por todos los éxitos que tenemos, por todos los logros y metas alcanzados, reconozco que es una labor de los dos, que yo sin ti no hubiera logrado tantas cosas, reconozco también todo tu apoyo, tu disposición, tu atención hacia mi persona, tu interés hacía mí que nunca has podido ocultar, tal vez no lleve un orden en mi escrito pues ha sido algo difícil ya que al hacerlo me gana el sentimiento, han sido ratos de llanto, de arrepentimiento, de fortaleza pues soy muy luchadora y lo voy a ser mientras viva, trato de concentrarme para que no falte nada de lo que necesito que sepas de mí.
Algo importante también es darte las gracias por todo lo que haces por mí, y te digo honestamente que mi vida no sería lo mismo sin tu existencia, todo lo que tengo te lo debo, y eso me muestra que significo mucho para ti, nadie que no le importa una persona hace todo lo que tú has hecho, haces y estoy segura que harás mientras vivas para que yo pueda sobrevivir, ahora que han pasado los años compruebo como los jóvenes también pueden enseñarnos cosas y me refiero a nuestros hijos, una de las cosas que me gustaría aprendiéramos de ellos es la forma en que viven su vida. Nosotros nunca nos dimos ese tiempo, nunca pudimos conocernos realmente, nunca estuvimos tan cerca como debimos estar, el querer encontrar razones del por qué fue así no sirve de nada,
lo que importa es el ahora, el presente, tal vez digo mucho pero perdóname ese es el objetivo, decir todo, no dejar nada volando, que todo te quede muy claro, en seguida te pondré por escritos mis sueños, mis ilusiones, mis propuestas, mis ideas, mi compromiso, mi deseo, la intensión de todo esto que escribo, si puedo lograr algo me sentiré feliz y si no pues seguramente cuando menos estaré más tranquila. Primeramente quiero que sepas que en mi han cambiado muchas cosas, una muy importante es que yo no te guardo ningún rencor, que entiendo que todo lo malo que sucedió por algo tenía que pasar así, quizá era necesario para poder reaccionar o al menos así quiero concebirlo, yo no te he olvidado nunca, te tengo en mí, te llevo en mi sangre, en mi corazón, en mi mente y en mi vida siempre, tal vez te extrañe y te parezca tan raro como a mí que a estas alturas te diga que te quiero, pero quiero decirlo, si antes no lo hice ni siquiera sé por qué.
También pienso que todo lo vivido en nuestra separación cuando menos a mí me ha servido de mucho por eso ahora puedo decirte tantas cosas, porque me di cuenta quién eres en verdad, porque he comprobado que ninguna vida se rehace, eso es falso, lo hecho ya hecho está y nosotros somos y tenemos una historia que aunque triste puede ser hermosa, nunca es tarde para reconstruir, solo nosotros podemos si queremos retomar las riendas de nuestras vidas, tú mencionas con frecuencia (la casa es de mis hijos) yo respeto tu expresión pero no coincido porque la casa es nuestra, es nuestro espacio, lo que construimos con dificultades, tristezas, alegrías, esfuerzos, ilusiones, con fracasos, con logros, con éxitos, el estar sola me ha llevado a pensar, a soñar y es algo de lo que te quiero contar, sí he soñado, he anhelado, he pensado que si quisiéramos podríamos darnos una oportunidad, quizá la última y la única en nuestra vida, todo se puede mientras se tiene vida, he soñado regresar contigo, demostrarte todo lo que no hice en su momento pero que todavía puedo hacerlo, he llorado por ti, le he pedido a Dios que me diera el valor y la fuerza para podértelo decir, sé que me arriesgo demasiado y sí tengo temor, pero al fin vale la pena.
Mi propuesta te puede parecer absurda pero yo quiero pedirte que me permitas regresar a la casa, te pido que lo pienses, que lo valores, que recapacites y que ojalá pudiéramos sorprendernos y sorprender a todos, me he imaginado la alegría de los muchachos, sus rostros, su paz, sería el mejor regalo que podemos darles. Tenemos salud, tenemos tantas cosas en común, tantos intereses, tantas cosas por vivir que estoy segura de que ya sería una vida plena a pesar de toda esta situación que hemos tenido que vivir, por mi parte te digo con el corazón en la mano que nunca ha habido una persona tan importante para mí como tú, yo te explico todo esto porque sé que puedo comprometerme a ser quien tú ni siquiera sabes que soy,
Te repito he cambiado y ahora ya no buscaría pleitos, reproches, groserías, ahora mi intención es totalmente distinta, es reconstruir el hogar de nuestros hijos, nuestro hogar, nuestra familia, si han existido otras personas en todo este episodio no importa, podemos aprender a verlas como el medio por el cual pudimos reflexionar, de una cosa estoy plenamente segura; nadie puede tener en nuestra vida la importancia que tienen los que forman parte de la historia, de nuestra historia. Tengo la humildad de decirte, de pedirte que me perdones por todos y cada uno de los momentos malos, tristes y dolorosos que te hice vivir, eso no se repetiría más, perdóname porque en su momento no pensé en el daño que te hacía y que me hacía a mí misma, ahora que la familia ha crecido sueño cuando voy a la casa con ocupar ese comedor,
somos ya una familia y deberíamos darnos la oportunidad de vivir una navidad juntos, de ocupar la casa, no tenemos por qué andar en otros lugares cuando ya podemos festejar muchas cosas juntos, así es como debería ser, con nuestros hijos, nueras, nietos, darle vida a esas paredes que gritan soledad, pero porque queremos, porque no nos hacemos el propósito de cambiar las cosas, creo que no sería tan difícil, me gustaría vivir tanto eso, llenar la casa de vida, de calor, de amor, nosotros somos los pilares de todos los que están tan cerca. Si me he atrevido a proponerte todo esto es porque soy mujer y en mí se albergan todas estas emociones y deseos, cuando estoy en casa, mi imaginación vuela, me veo viviendo tantas cosas hermosas, tantas alegrías, domingos con los muchachos, visitas, desayunos, observo y todo está puesto solo falta nuestro deseo de llevarlo a cabo.
No sé cuál sería tu miedo y quizá no me lo digas pero yo sí puedo decirte que no sientas temor, que las cosas serían totalmente diferentes, ya nuestros hijos no son niños, podemos organizar nuestras cosas todos juntos, podemos disfrutarnos porque nos pertenecemos, en mi ahora son solo sueños que no puedo llevar a cabo yo sola porque te necesito a ti para realizarlos. Me gustaría que pensaras como yo y que concluyeras que vale la pena, porque cambiará para siempre nuestras vidas, no sabemos cuántos años estaremos con ellos, te invito a que lo pienses, a que lo valores y verás que sería muy bonito, lo que pasó podemos dejarlo atrás, total ya pasó y de ahora en adelante viviríamos tan diferente, yo he pensado en recompensarte todo el tiempo perdido, en que encuentres en mi comprensión, cariño, atención, interés, alegría, apoyo, compañía, te va a dar risa pero si piensas que estoy loca, ni modo, como el hombre al que conocí desde niña quiero confiarte a manera de broma que ahora con tantas bodas pues hasta podríamos organizar la nuestraja ja sería tan original ¿te imaginas? Nuestros hijos como testigos, pero ahora sí me regalas mi anillo, ¡malvado! porque en la primera te hiciste y todavía me lo debes, (bueno si no te quieres casar otra vez conmigo lo acepto, ¿ok?)
Pienso que todas esas vivencias nos ayudarían a dejar atrás todo lo triste que hemos tenido que vivir, ya los dos experimentamos cosas diferentes, tú ya hiciste todo lo que has querido como hombre, como soltero, quizá te hacía falta vivirlo pues eras muy jovencito cuando te comprometiste en formar una familia. No me gustaría que me contestaras inmediatamente que es lo que piensas, me gustaría que de verdad te lo imagines, con calma, cuando estés solo en casa procura soñar como lo hago yo cuando voy y verás que de solo imaginarlo se disfruta, entonces porque tiene que ser solo un sueño si podemos hacerlo realidad, no hay nada de malo, al contrario todo es bueno y en beneficio de muchos.
Mira la fotos que junté a este escrito, ahí falto yo y tú lo sabes, quiero que te quede claro que no te obligo a nada, que si tomé la decisión de proponerte todo esto es porque eres mi esposo, el padre de mis hijos y porque es a ti a quien quiero y debo decirte que me permitas unirme a ustedes. Por favor, no dejes que mi vida termine con el dolor que tantas veces he tenido que llorar al ver fotos como estas, que en tus manos está cambiar nuestras vidas, ¡regrésame la vida! yo sé que puedes hacerlo, quiero estar con ustedes, ustedes son mi familia, quiero envejecer y morir ahí no me niegues la oportunidad ni te la niegues tú porque nada valdrá más la pena que regresar a poner todo en su lugar, por favor, no te burles de mi escrito, de mis comentarios, no lo hagas porque no puedes imaginar con que inmenso amor y hermoso sentimiento lo he escrito para ti.
FEBRERO, 2013
La respuesta a este escrito ha sido un absoluto silencio y por consecuencia mucho dolor.
Colaboración de Marmar
México