El destino ha sido nuestro peor enemigo,
cada vez que estamos a punto de vernos
llega un imprevisto que no lo permite
y te pierdo de nuevo.
Soledad, soledad es lo que siento
quizás tengamos que aceptar la realidad,
somos como una pila
dos polos opuestos que solo causará gran herida
y un profundo dolor en nuestros pechos.
Coraje siento al tenerte cerca y a la vez tan lejos;
qué maldito es el destino
que no permite encontrarnos de nuevo.
Empezaré a clamar al cielo
para ver si me escucha y acepta lo que por ti siento,
la esperanza la tengo
y rendirme jamás está presente en mis pensamientos.
Colaboración de Deyner91
Venezuela