El amor que sentía por ti se acabó,
porque tú decidiste irte para siempre
sin decirme adiós; qué tonto fui al
enamorarme de ti, porque estaba ciego
y no quería ver el daño que me hacías;
Me destrozaste el corazón en mil pedazos;
pasaron los años y juré que jamás
volvería a llorar por amor.
Pero después comprendí que la vida me dio
una segunda oportunidad de amar a esa persona
tan especial, que me aceptara como soy y ahora
soy muy feliz a su lado. Un día decidiste regresar;
me buscaste por todas partes y cuando me encontraste,
me pediste perdón por haberme dejado y me
imploraste que regresara contigo, pero ya era demasiado
tarde, porque yo era feliz sin ti y te pedí que te fueras,
porque te estabas lastimando a ti misma.
Me di cuenta de que al alejarme de ti,
me sentía libre de tu desamor y tu falta de comprensión;
esa persona tan especial que apareció en mi vida
cuando yo estaba a punto de deprimirme más,
me dio un soplo de vida que me ayudó
a salir adelante y que me enseñó a ver las cosas más bellas
del mundo, como lo es ella y poder amar como nunca antes
lo había hecho; por eso a ella la amo tanto
y le dedico tiempo valioso; y a ti te deseo
que algún día encuentres la felicidad
y el amor que nunca me tuviste.
Colaboración de Natanael Silva
México