¡Tú mismo lo dijiste! Cuando se ama, todo es fácil,
cuando se trata de olvidar, es más complicado.
Amor, yo te amé, tal vez te siga amando,
Sin comprender ¿por qué? si ayer nos quisimos tanto.
¿Entonces por qué nos dejamos?
Dices tú haber rogado por mi amor y a cambio yo,
solo te di dolor.
Pero aguarda, tú mismo lo dijiste, cuando de amor
se trata, todo es fácil,
fácil, querías entonces,
mi amor, mi comprensión.
Al saber que anidaba en ti otro amor que no era yo,
nos apartó a los dos y fue así, cuando me viste
fría y frío te vi yo, cuando pretendisteis
¡querernos a las dos!
Sí, siempre nos resulta fácil el camino del amor.
Lo triste es borrar las huellas del sentimiento
puro, que se anidó aquí, en el corazón.
Colaboración de Noemí
Argentina