Para: DINORAH
BOMBONCITO luz de mi vida fuego de mis entrañas, querida y distante, te escribo esta carta desde mi infierno privado.
Desde mi ventana veo un sol rojo sobre Ecuador, un pájaro negro vuela sin ruta y sus alas parecen dos navajas en el aire.
Acá, la gente sigue viviendo con sus celulares. Por las noches coquetean y se prometen mentiras para no ver triste las paredes tristes de sus habitaciones.
En las calles, quienes no pueden conseguir amor lo maquillan con sexo de quince minutos o con caricias anónimas y vacías como el humo del cigarrillo.
Ecuador es como una fiera triste que duerme sobre una isla bulliciosa.
Tantos edificios, tantas caras de corazones muertos, tantos adictos que se destruyen para construir una postiza felicidad analgésica. Pero yo estoy a salvo de la vulgaridad, gracias a ti pumbuchita, porque me despierto todavía queriéndome vivo.
En los días amarillos de Enero vuelvo a mirar tu retrato que me acompaña junto a mí, esperando que yo llegue a tu vida para descubrirte.
“Somos culpables de este amor escandaloso, que el fuego mismo de pasión alimentó… poco a poco, fuimos volviéndonos locos…”, dice una canción de mi jodida patria “NUESTRO JURAMENTO”.
Me entristezco. Es la misma canción de la radio que sonaba una y otra vez sobre la alfombra de mi cuarto.
Querida Dinorah, no te escribo para despedirme, te escribo para anunciarte con el fino y animal propósito de secuestrarte y comerte a mordiscos.
Anunciarte que llegué con más ganas, para quedarme y luchar por tu AMOR.
Pronto llegará la noche. Mi vida tiene una mitad oscura, ese lado insufrible se debe a tu ausencia.
Como un bebé que ha comprendido la orfandad, cada día evito pensar en la compañía que me falta y todavía no me puedes dar. Dile a él que yo te doy fuego y alegría, que yo te hago amar con más amor…
Pesadas lágrimas me cortan la piel cuando te imagino, enojona, desanimada, sintiendo ganas de abrir la puerta y secuestrarte para siempre…
Linda, te escribo estas palabras para ofrecerte en tinta negra mi fe eterna. Brindaré siempre por el destino, por tu arribo inesperado a mi vida.
“No, no puedo… ¡Aja, no puedo!”, dirás por tu novio ya se que dirás “QUIEN MUCHO ESCOGE SE QUEDA SOLO”, en cierta forma, sería muy conveniente que muchas personas sean “mas escogedoras”, pues así habría muchos menos divorcios y relaciones disfuncionales, conviene siempre recordar que el alma gemela esta en algún lugar esperando por ti y yo ya dejé de buscar, porque te encontré a ti PUMBUCHITA.
Pumbuchita, me gustaría tenerte a mi lado como si pudiera ser normal que estemos juntos. Como si vos no estuvieras comprometida con un hombre al que no amas.
Debo cazarte/casarte de alguna manera… te ofrezco el nacimiento de una tercera y tierna vida en nuestra vida, te ofrezco la obediencia de mi cuerpo y de mis besos.
Pumbuchita, te ofrezco mi muerte en tus brazos que ya saben que vivo para hacerte feliz.
Tu: BEBE REBELDE
Colaboración de HpSobredosis
Ecuador