Es increíble que después de tanto tiempo en que Jesús estuvo aquí, y de todo lo que hizo nadie sea capaz de entender el verdadero significado de sus enseñanzas y sacrificios. Yo aprendí con él que todos somos dignos del Reino de DIOS.
Todos creen porque el dio su vida ya están salvados, creo que el amor que puedas dar por otro ser humano es la clave de la salvación, mientras más juzgas a otros más lejos estas del Reino de DIOS.
Cada ser humano merece una oportunidad siempre y cuando se arrepienta de su maldad. El pecado más grande que Dios aborrece es la falta de amor al prójimo, porque de nada te sirve rezarle, alabarle y pedir perdón por tus pecados, si no eres capaz de amar, si no tienes humildad en el corazón, como lo tuvo Jesús.
Ante los ojos de DIOS el amor y la bondad lo resumen todo. JESÚS dejó un legado: que debemos amarnos como él nos amó, y nos sigue amando esperando que algún día podamos de todo corazón ser como él. Es lo único que le interesa. Estoy seguro y tengo fe, que sólo con amor, bondad y humildad llegaremos al reino de DIOS.