Todo comenzó hace años, sin darme cuenta a pesar que el tiempo nos llevó por distintos caminos el caprichoso destino se encargó de juntarnos, irónicamente cuando tú ya no estás aquí tan cerca de mí. 

Mi carácter de aquellos años hacia que pienses que nunca quise nada contigo, pero era totalmente distinto me moría por un hola de tu parte con esa linda sonrisa era suficiente, no recuerdo muchas cosas de aquel tiempo como tú, pero desde esa noche que recibí un hola por mensaje no sabes cómo mi corazón latía tan apresuradamente… parecía detenerse el tiempo era como una segunda oportunidad para volver a retomar eso que nunca empezó. 

Esa primera noche fue un flechazo a mi corazón, removiste mis sentimientos e hiciste que me enamorase de ti: esos días, esas noches, esas charlas y video llamadas aun no lo puedo creer. Aun no puedo creer que hayas dicho que me quieres y de una u otra forma soy importante en tu vida. Te extraño, extraño mucho escuchar tu voz diciéndome todas esas cosas tan bonitas que jamás creí podrías decirme de tus labios, soy paciente, te quiero y confío en ti no miento al decirlo, solo que hay momentos en los que los pensamientos me atormentan y mi corazón se siente triste al pensar que por un momento estoy viviendo un sueño de amor que no terminará bien, siempre dicen que el que más da es el que más pierde y es así, decir lo que pienso a veces me hace perderlo todo, pero no quiero callarlo tampoco, si no entiendes o te molesta lo siento. 

Nunca será mi intención hacerte enojar pero yo tampoco entiendo porque a veces callas las cosas, dices haré esto o estoy haciendo esto porque en esos planes o ese futuro tuyo no me veo en ningún lado. No sé cómo a veces puedes ser el hombre más lindo del mundo conmigo y otros el más frío y duro, si lloro es porque me duele y mucho, nunca te quiero decir adiós porque contigo es con quien quiero pasar mi vida, estoy muy segura de lo que siento por ti, ahora entiendo porque dicen que se sienten como mariposas en el estómago cuando amas a alguien, una vez te dije que tú eras el único hombre que puede hacer mi corazón acelerarse y detenerse a la vez, el dejarnos de hablar no soluciona nada o hablar como si nada hubiese pasado tampoco, tal vez después de leerlo aún no comprendas o te rías, acepto que soy cobarde para hablar porque no tendré el valor ni las palabras para hacerlo mirándote…