Me he percatado de una cosa, y es que cada vez que te recuerdo suspiro, no se el por que, no podría dar una respuesta con un buen argumento, me he puesto a pensar en todas y cada una de las posibles respuestas; tal vez sea ese brillo único en tus hermosos ojos cafés, tan brillantes que hasta un ciego podría contemplar su brillo, o por tu sonrisa, tan blanca y brillante que hasta la perla mas fina, tendria envidia de aquella sonrisa.
También podría ser aquella única forma tuya de ser, esa que te define y te hace auténtica, tal vez aquellos simples gestos, esos que haces cuando estás aburrida y empiezas a ver a todos lados, o esa otra de mover tu pluma cuando estás desesperada, o tu manía de sacar un poco y ligeramente tu lengua a la derecha, como me vuelve loco; también pensé en que no podría ser por ti, si no por lo que haces, por como me haces sentir, porque me haces sentir querido, especial, me haces querer cambiar para bien, me motivas y me inspiras. También es porque contigo estoy aprendiendo la diferencia entre gustar, querer y amar, y es que tal vez sea un poco precoz, o no, pero empiezo a sentir cosas por ti, cosas que jamas en mi vida había sentido; y es que haces que mi pequeña y miserable vida, tenga un poco de sentido.