Comencé a escribir estos sentimientos, en un papel manchado con el paso del tiempo y con una pluma olvidada en algún lugar. Las lágrimas caen con cada palabra, y las palabras llegan con cada lágrima. Un río de emociones resurge entre las cenizas de mis heridas.
Pero soy fuerte, y quizás lleguen a un gran mar azul, donde habrá espacio para embarcarnos en una tormenta de sueños, hasta llegar a nuestro lugar prometido.
Puedo ver nuestras alas entrelazadas, haciendo danzar las hojas otoñales. No siento frío en mi pecho, porque tu calor es suficiente para mi voluble corazón.
Jamás podré conocerte totalmente, pero estoy esperanzado a hacerlo. Ahora una muralla divide dos corazones, que en una vida fueron uno solo. Ser fuerte y seguir adelante, son palabras que nadie comprende. Porque ellos no saben la diferencia entre amar y querer.
No son estúpidos, solo se dejan encandilar por la luz de una día nublado, del cual no hay salida sin amor. Amor, hermosa palabra que describe mi mundo, nadie puede entenderla, solo hasta que se ve en peligro, y yo no supe entenderla hasta ahora.
Quiero estar para ti siempre, sin esperar algo a cambio. Por eso te he escrito, para hacerte saber mi promesa.
“Los años pasan, las épocas cambian, el tiempo avanza, pero... las canciones terminan, las hojas mueren, las tormentas acaban. Por eso nunca terminaré con esto que siento en el pecho, no dejaré que la tormenta cambie mi curso y jamás romperé esta promesa de amor hacia ti".
Colaboración de
Vash
México