25-julio-2013
César, amor…
Mi lápiz comienza a escribir…
Haciendo un recuento y recordando un poco, puedo decirte que mis ilusiones volvieron a vivir desde que te reencontré en aquel evento donde después de muchos años desde 1989 hasta ese 2005, cuando en el ex Balneario Olímpico volví a verte.
¡Cómo no reconocer al hombre que mucho tiempo vivió en mis sueños y mis anhelos! Tus rasgos inconfundibles para mí, tu mirada, esa que hace voltear a cualquier mujer.
No éramos los mismos en apariencia, es verdad, el tiempo ya había pasado y dejado rastro en nosotros, pero aun así te reconocí inmediatamente. Tuve el impulso de hablarte esperando que tú también me reconocieras. Así lo hice, me acerqué y conversamos. A ti te fue más difícil recordar, tuvimos que platicar algunas anécdotas, pero al final recordaste.
Retomamos ese día, la amistad y mi meta fue no volver a soltar tu mano.
Cuántos recuerdos diferentes de todos esos momentos vividos en esa época donde tu mundo era la música y el mío eras tú.
Ahora después de 27 años, la vida te vuelve a traer a mí, primero para continuar la amistad y ahora hace unos días como mi novio. Entonces me quedo pensando… ¿será mi sueño realizado? ¡Mi amor platónico pasó a ser real! ¡Qué afortunada! ¿No crees? ¿Cuántas personas podrían vivir este milagro que vivo yo ahora?
En esta fase de mi vida me siento renovada en cada momento que vivo junto a ti, nada se compara al tenerte cerca y lo más increíble es que tú llenas todos mis espacios.
¡A partir de hoy no quiero perderme ningún amanecer en tus brazos! Escuchar tu voz susurrándome tus deseos, sentir tu calor brindándome protección y acelerar todo mi ser con tus suspiros.
Eres el ángel que me enviaron del cielo… ¡Exactamente el que yo pedí, el más hermoso!… Tal vez les hagas falta en el cielo… ¡pero nunca más que a mí!
Y aunque ocultas tus alas para vivir aquí en este mundo, cuando estamos juntos y llegamos al clímax, tú las abres y las extiendes porque siento cuando me elevas…
Eres el hombre que mis anhelos dibujaron siempre en mi mente, en mi alma y en mi corazón.
Qué tristes son las noches cuando no estás. Te extraño tanto que te busco entre mis sábanas…
Entre tus brazos mi cuerpo se llena de ti…
¡En la intimidad contigo en un instante se viven mil años!
¡Qué sensación tan increíble! ¡Estoy segura que el cielo no se estremece tanto con un rayo, como mi cuerpo al sentir tu roce! Tu aliento me llena de besos llenos de magia y derriten mi piel. Los orgasmos que no terminan, que se forman uno a uno y esperan su turno…. ¡Nunca, jamás imaginé llegar, al lugar donde me llevaste tú!! No conocía una entrega total, nunca había sido conducida con tanta delicadeza, amor y pasión. ¡Me despertaste a la vida!
Sé que estoy loca por ti, que en la mayor parte del tiempo no puedo unir dos ideas sin que tú te interpongas entre ellas. A veces pienso… ¿Será que me has privado de la razón?
Siento amor en cada poro y estoy viviendo solo por amor a ti…
Eres mi ángel de alas ocultas… el que yo pedí… por el que esperé siempre…
Mayte
Colaboración de Mayte Garcia
México