Y esa soledad,
que me atrapa,
que me hace asesino de mi seguridad,
que me envuelve en un estado de desenfreno,
de esperarte, de buscarte,
aunque a ti no te agrade.
Pero te seguiré. ¿Sabes por qué lo haría?
Porque la vida me enseñó,
que el cielo,
está en tu mirada, que mi mirada,
se cruza con la tuya
y que mi miedo desaparece con tu voz.
Colaboración de FASH
Guatemala