Amiga,
que hoy tienes esos ojos tristes,
que no puedes conciliar el sueño,
¿Quieres que te de un consejo?
Es verdad lo que dicen,
que un clavo saca otro clavo
pero ten cuidado,
con ese clavo que llevas
entre tus dedos,
porque si bien lograrás con éxito
sacar el clavo oxidado
que te ha causado
tanto dolor y sufrimiento
el que usas para sacarlo
quedará dentro,
y te digo mi estimada amiga
que puede ser que el segundo
te haga una herida
más profunda y más dolorosa
que la que te hizo el primero
