Me la he pasado estos años pensando cómo ser feliz
mirando mi reflejo en algo que se decía espejo, y que sólo reflejaba mentira
Me la he pasado intentando construir una vida basada en el propio engaño,
buscando amor en una caja vacía, donde ni el polvo puede ser encontrado.
Busqué el amor en seres que olvidaron cómo sentir realmente, seres como yo, quizá.
Me la he pasado destruyendo mi vida poco a poco, en vez de salir de esa caja y buscar afuera,
en el mundo que da miedo, donde lo hay de todo, o al menos todo lo que no está en esta caja.
Miedo a ser uno mismo, escondiéndose ahí dentro, sin saber que oculto estoy,
esperando encontrar ahí dentro todo lo necesario para la vida, para la felicidad.
Estando dentro de una caja, que al mismo tiempo está vacía,
vacía porque si quien la habita es un ser falso, que ha perdido la capacidad de encontrarse a sí mismo, quien no significa nada.
Dando vueltas mi pensamiento no puede más andar,
intenta buscar una solución, pero no tiene idea de qué es lo que debe reparar,
quiere escapar, no encuentra salida, pues la puerta se traza al pensar y cansado se encuentra ya su pensamiento.
Grita dentro de la caja, pero el vacío no permite escuchar, el grito de ayuda que intenta exclamar.
Se oscurece cada día más y quizá solamente una lágrima es quien por ahora le acompañará,
hasta que pueda salir de su propia oscuridad.