Un comerciante le pregunta a Jesús: — ¿Cómo puedo ganarme el paraíso? Y Jesús le contesta: — Obedeciendo los diez mandamientos. A lo que el comerciante responde: — Los he seguido desde que nací. Entonces Jesús le dice: — Pero aún te falta algo. — ¿Qué? — pregunta el comerciante. Y Jesús le contesta: — Vende todo lo que tienes, y dale el dinero a los pobres. Uno de los apóstoles que estaba escuchando le pregunta al otro: — Oye… nosotros somos pobres, ¿verdad? Y el otro discípulo le contesta: —Sí. Entonces el discípulo, tocándose con su mano derecha la barba, dice: — Mmmm…