Creí que al perderte tal vez ganaba pero tarde he comprendido que no es así, ahora veo que los amaneceres y los crepúsculos son lo mismo sin ti.
Entiendo que tal vez los puños de agua que me regalaste, se han ido tras de ti, y que aquellas mañanas ya no volverán. Que tu sonrisa siempre estará presente y que tú ya no estás, comprendo ahora
todo lo que quisiste que supiera y aun cuando tu partida dolió, me hizo ganar.
Gané mi libertad, esa que me obliga a sonreír y me obliga a mentir,
que ahora fabrico sueños con los besos que olvidaste, con las caricias que no me diste y que nunca me darás. Pero gracias por mi llanto y por tu adiós.
Colaboración de Patito Divine
México