Si tan solo supieras lo feliz que hace a mi alma el verte No se atrevería A negarme el placer De ver tu rostro aunque fuera un minuto, aunque sea un segundo, por tan solo un momento, más te ocultaste de mí y no entiendo el porqué, haciéndome sufrir, tratando de entender, no tengo una respuesta, desdichada de mí, necio este corazón que se niega a comprender, que insiste en sentir, que no quiere ceder ¿Hasta cuando? No lo sé, dime tú, qué puedo hacer, vivo al filo de la espada caminando en el peligro frágil y fuerte al mismo tiempo con conciencia de los riesgos, más dispuesta a entregar mi corazón sin vacilar Marcas tiene Ya mi alma De dolor y sufrimiento Ansias tiene Ya mi ser De vivir esto que siento Dejaré a la distancia Lo que esperaré en el tiempo y el anhelo de mi alma que hoy me quema lo conservo.