Parado estoy al borde de este abismo
con el alma cargada y dolorida,
propóngome dejar pronto esta vida,
Pues odio convivir conmigo mismo.
Ya no tengo razones, no hay sentido,
Para seguir viviendo en este mundo,
Donde todo parece nauseabundo
Y todo lo que he amado está perdido
Voy buscando en mi mente ese valor,
Que me de decisión para aventarme;
Pero dentro de mi, quiero aferrarme
A una mano extendida cuyo amor,
Cure en mi corazón tan cruenta herida
Y reconcilie mi alma con la vida.