El tiempo tiene la maña, no sé ni porque ni cómo, él logra desbaratar planes y atropellos de las situaciones sin preguntar antes. Solía decir tiempo al tiempo, conjugando momentos y placeres incongruentes,
no obstante me jugaba una mala jugada.
Hoy el tiempo tiene sus mañas. Aprender a vivirlo es la forma más difícil de disfrutar la vida. No te detengas, no lo hagas.
Colaboración de Leona
Argentina